La cantidad de agua que utilizan las plantas depende del clima, del contenido de agua en el suelo y la especie cultivada. La determinación y el monitoreo de la humedad del suelo es primordial para resolver problemas vinculados a las necesidades de riego de los cultivos. La programación del riego debe responder a dos preguntas básicas: ¿Cuándo regar? y ¿Cuánto regar?.
El ion nitrato tiene carga negativa y, por tanto, no puede ser retenido por las arcillas, es fácilmente transportado por el agua. Las láminas de agua excesivas o lluvias abundantes favorecen su arrastre hacia estratos inferiores del suelo, fuera del alcance de las raíces. Esto representa pérdidas económicas para el agricultor, tanto por el desperdicio de nutrimentos como por la disminución del rendimiento. Adicionalmente, la lixiviación de nitratos tiene mayores consecuencias negativas, generando daños a la salud y contaminación de acuíferos. Para mitigar este problema se debe tener un manejo muy cuidadoso del riego y de los fertilizantes nitrogenados.
El costo más importante en la operación de pozos y plantas de bombeo es la energía eléctrica, por ello, la mejor manera de conocer el estado que guarda el sistema de bombeo es realizar estudios de eficiencia electromecánica, que consisten en una serie de pruebas y mediciones en los equipos de bombeo de pozos, tomando en cuenta los parámetros eléctricos, niveles de bombeo, presión y gasto, que permita finalmente determinar la eficiencia del equipo, así como las causas que merman la eficiencia.
Un agua de calidad es aquella cuyas características cubre los requerimientos del uso que se le piensa dar. En el caso específico de su uso para riego de cultivos se pone especial énfasis en las características químicas y no tanto así en las físicas. En la práctica un agua “ideal” para el cultivo es poco probable, sin embargo muchas de sus características son manejables y también juegan un papel importante otros factores como el tipo de suelo en el que se pretende de cultivar, especie a cultivar y condiciones del clima de la zona.
La programación del riego tiene como objeto central el que se tomen decisiones orientadas a determinar las cantidades de agua por aplicar y las fechas de aplicación de cada riego con la intención de minimizar deficiencias o excesos de humedad en el suelo que pudieran causar efectos adversos sobre el crecimiento, rendimiento y calidad de los cultivos. Con una adecuada programación del riego se puede lograr u n importante ahorro en el agua, se disminuyen costos por ahorro de energía y mano de obra, se minimiza estrés hídrico y maximizan rendimientos, así como la calidad, rentabilidad e ingresos
El riego por goteo es uno de los sistemas más eficientes en la actualidad, el suministro de agua es constante y uniforme, gota a gota, que permite mantener el agua de la zona radicular en condiciones de baja tensión. El agua aplicada por los goteros forma un humedecimiento en forma de cebolla en el interior del suelo, al que comúnmente se le denomina “bulbo húmedo”
Uno de los factores determinantes en la práctica del fertirriego es la calidad del agua. La calidad del agua de riego para la agricultura es muy importante e influye en la planificación del riego, debido a que nos determina los componentes de la instalación del sistema de riego y su manejo, además del cultivo a establecer. La calidad del agua de riego afecta tanto al rendimiento de los cultivos como a las propiedades físicas del suelo, especialmente a la conductividad hidráulica.
Cada día más agricultores, agrónomos y personas relacionadas a la agricultura usan dispositivos móviles para estar en comunicación. Algo que va en aumento con esto es la oferta de aplicaciones (apps) para distintos usos, por la facilidad de descarga y practicidad de uso, se prevé que para el 2017, la descarga de estos apps podría exceder de 100 millones.
La papaya (Carica papaya L.) es una planta de clima tropical, lo que corresponde a áreas cálidas que están comprendidas desde el nivel del mar hasta los 1000 metros; pero los mejores rendimientos y calidad de frutos se obtienen entre los 0-600 msnm.
La disponibilidad del agua es cada vez menor en México y en el mundo, la demanda incrementa proporcionalmente a la población humana ya que se requiere del líquido para las funciones vitales, sobre todo para la producción de alimentos.