El presente artículo describe aspectos de suelo, cultivo y ambiente que incrementan la expectativa de respuesta al uso de microelementos en cultivos extensivos. Se hace hincapié en los estudios de suelo, determinando su disponibilidad, y a las deficiencias inducidas por estrés hídrico, defoliación o interacción con otras prácticas agronómicas. Finalmente, se enfatiza en la correcta aplicación para obtener los resultados esperados.
La floricultura en la sierra centro y norte del Ecuador se viene desarrollando desde la década de los 80 y toma un gran impulso en los años 90´s, ya que las condiciones agroclimáticas en estas provincias son ideales para el desarrollo de cultivares de rosa de calidad y por estos motivos las rosas ecuatorianas son de gran aceptación y prestigio a nivel mundial ya que cumplen exigentes estándares de calidad.
La biofortificación es una técnica viable para contrarrestar la deficiencia de micronutrientes en los cultivos mediante técnicas de fertilización, fitomejoramiento tradicional o biotecnología, obteniendo alimentos vegetales enriquecidos con vitaminas y nutrientes de gran importancia para la dieta alimentaria. Esta técnica se ha implementado con el fin de desarrollar cultivos rentables que puedan incrementar la ingesta de zinc (Zn) o algún micronutriente en las personas con riesgo de deficiencia.
La fijación biológica del nitrógeno (FBN) es el proceso mediante el cual los microorganismos reducen el nitrógeno atmosférico en amoniaco, posteriormente este compuesto se transforma en otros compuestos nitrogenados que son útiles para las plantas. La FBN representa una alternativa a la fertilización nitrogenada.
Existen tres tipos de plantas de acuerdo con los mecanismos de asimilación del CO2 en la fotosíntesis, donde el grupo más antiguo es el de plantas de metabolismo fotosintético C3, seguida de las plantas C4 y, finalmente las plantas CAM. Ejemplos de cultivos con mecanismo C3 son: arroz, trigo, cebada, soya, pimiento y tomate. Mientras que cultivos con mecanismo C4 son: maíz, caña de azúcar, sorgo y amaranto. Finalmente, entre los cultivos con mecanismo CAM encontramos: piña, nopal, pitahaya y orquídeas.
El fósforo es el segundo nutrimento en importancia, dada la frecuencia con que ocurre su deficiencia en el suelo. Esta deficiencia está muy asociada a la baja movilidad del fósforo en el suelo al ser altamente fijado o precipitado por los minerales que lo componen, por lo que emplear la fuente adecuada permitirá mejorar la absorción de fósforo por los cultivos.
El selenio juega un papel importante en distintos procesos fisiológicos de las plantas, que les ayudan en su crecimiento, protección contra depredadores y patógenos, estrés hídrico, entre otros procesos. Sin embargo, las respuestas fisiológicas y bioquímicas varían considerablemente entre especies.
En la producción de cultivos un aporte nutricional completo contempla la adición de calcio, ya que las deficiencias de este nutriente en los vegetales provoca: mal desarrollo radical, desarrollo anormal de hojas y enrollamientos, deformación y falta de tamaño de frutos, pudrición apical o blossom end rot, depresión amarga o bitter pit, rajado de frutos, mala vida de anaquel y frutos aguados.
El molibdeno es absorbido por la planta en forma de ion molibdato. Es un elemento relativamente móvil dentro de la planta. Asimismo, puede ser absorbido en cantidades considerablemente altas sin presentar síntomas de toxicidad. Las funciones principales del molibdeno se encuentran estrechamente relacionadas con la asimilación del nitrógeno.
Los aminoácidos tienen funciones múltiples en la fisiología de las plantas; gran capacidad de sustituir parcialmente a los fertilizantes químicos nitrogenados y potencial para prevenir y reducir ESTRESES VEGETALES.